Pedagogical Constellations Volumen 3 (I) enero-julio 2024, 207-230
ISSN en línea: 3028-5208
Artículo de investigación
Family interventions and their impact on the academic performance of students in latin america
Universidad Tecnológica del Cibao Oriental (UTECO), Cotuí, República Dominicana
https://orcid.org/0009-0007-3557-3764
Fecha de recepción: 05-05-2024 Fecha de aprobación: 17-06-2024 Fecha de publicación: 30-07-2024
Cómo citar este artículo/Citation: Nyirimanzi, T. (2024). Intervenciones familiares y su impacto en el rendimiento académico de estudiantes en América Latina. Pedagogical Constellations, 207-
230. https://doi.org/10.69821/constellations.v3i1.37
Resumen
El rendimiento académico de los estudiantes está influenciado por una variedad de factores, entre los que la funcionalidad familiar juega un papel crucial. Las familias que mantienen una buena comunicación, cohesión y apoyo emocional tienden a proporcionar un ambiente más propicio para el éxito académico de los estudiantes. El propósito fue explorar cómo las intervenciones familiares diseñadas para mejorar las dinámicas dentro del hogar pueden impactar positivamente en el rendimiento académico de los estudiantes. Para abordar este tema, se realizó una revisión exploratoria de estudios recientes en América Latina. La metodología utilizada fue una revisión sistemática de literatura, con enfoque cualitativo. Los resultados mostraron que las intervenciones familiares, como los talleres de habilidades parentales y el apoyo psicológico, mejoraron significativamente la comunicación y la cohesión dentro del hogar, lo que a su vez influyó positivamente en las calificaciones y el compromiso académico de los estudiantes. Conjuntamente, se observó que las familias disfuncionales, que participaron en estos programas, también experimentaron mejoras, aunque los resultados fueron más limitados en comparación con familias funcionales. Se reafirma la importancia de fortalecer las dinámicas familiares para mejorar el rendimiento académico, y sugiere que las políticas educativas deben integrar programas familiares para garantizar un entorno más estable y favorable para los estudiantes.
Palabras clave: América Latina, funcionalidad familiar, intervenciones familiares, participación parental, rendimiento académico.
Copyright: © 2024 por el/los autor(es). Este es un artículo de acceso abierto distribuido bajo los términos
de la licencia de uso y distribución Creative Commons Reconocimiento 4.0 Internacional (CC BY 4.0).
Abstract
The academic performance of students is influenced by a variety of factors, among which family functionality plays a crucial role. Families that maintain good communication, cohesion, and emotional support tend to provide a more conducive environment for the academic success of students. The purpose of this study was to explore how family interventions designed to improve household dynamics can positively impact students' academic performance. To address this topic, an exploratory review of recent studies in Latin America was conducted. The methodology used was a systematic literature review with a qualitative focus. The results showed that family interventions, such as parenting skills workshops and psychological support, significantly improved communication and cohesion within the household, which in turn positively influenced students' grades and academic engagement. Additionally, it was observed that dysfunctional families participating in these programs also experienced improvements, although the results were more limited compared to functional families. The study reaffirms the importance of strengthening family dynamics to enhance academic performance and suggests that educational policies should integrate family programs to ensure a more stable and supportive environment for students.
Keywords: Latin America, Family functionality, Family interventions, Parental involvement, Academic performance.
Copyright: © 2024 by Author(s). This is an open-access article distributed under the terms of the Creative Commons Attribution 4.0 International License (CC BY 4.0).
1. INTRODUCCIÓN
El rendimiento académico de los estudiantes ha sido un tema central en las investigaciones educativas, dado su impacto directo en el éxito personal y profesional de los individuos (Reyes Carreto et al., 2014). En particular, la familia juega un papel crucial en el desarrollo académico de los estudiantes, ya que las dinámicas familiares influyen en el bienestar emocional, la motivación y la capacidad de los estudiantes para enfrentar los retos escolares. Dentro de este marco, la disfuncionalidad familiar, entendida como el deterioro en las relaciones familiares y la incapacidad para mantener una estructura de apoyo, ha sido identificada como un factor que puede afectar negativamente el rendimiento académico. Sin embargo, las intervenciones dirigidas a mejorar la funcionalidad familiar como estrategia para potenciar el éxito
académico siguen siendo escasas y dispersas, especialmente en el contexto latinoamericano (Martínez Chairez et al., 2020).
Desde el campo de la psicopedagogía, se ha explorado ampliamente cómo los factores familiares afectan el rendimiento académico, pero la investigación ha tendido a centrarse en los aspectos individuales del estudiante (autoestima, ansiedad, etc.) y no tanto en la interacción sistémica entre la escuela y la familia. A pesar de que existen estudios que sugieren que una mayor participación de los padres en las actividades escolares puede mejorar el desempeño académico, los enfoques que integran la funcionalidad familiar como un todo no han sido suficientemente abordados. Esto deja un vacío en la literatura respecto a cómo las intervenciones dirigidas a mejorar las dinámicas familiares podrían optimizar el rendimiento escolar, particularmente en contextos de alta vulnerabilidad social.
Diversas investigaciones han documentado la relación entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico. Por ejemplo, un estudio reciente en Ecuador reveló que los estudiantes en zonas rurales, donde las dinámicas familiares tienden a ser más disfuncionales debido a problemas socioeconómicos, mostraban un menor rendimiento académico en comparación con sus pares en zonas urbanas (Toala Chilan y Cevallos Cedeño, 2022). Al mismo tiempo, investigaciones en México han destacado que la participación familiar puede reducir conflictos y mejorar el rendimiento académico, pero no todas las familias logran implementar dinámicas funcionales que favorezcan estos resultados (Rodriguez-Oramas et al., 2021). A pesar de estas evidencias, pocos estudios han explorado en profundidad las intervenciones destinadas a mejorar las dinámicas familiares y cómo estas pueden traducirse en mejoras en el ámbito académico (Casquete Tamayo et al., 2024; Gómez Rodríguez, 2024; Cujilán et al., 2024; González Ciriaco, 2024).
Este artículo aporta un enfoque novedoso al explorar las intervenciones actuales dirigidas a mejorar la funcionalidad familiar como una estrategia para optimizar el rendimiento académico en estudiantes de América Latina. A diferencia de estudios previos que se han centrado principalmente en los factores individuales o estructurales, esta revisión integra un análisis de cómo las dinámicas familiares pueden ser transformadas a través de intervenciones específicas, destacando la importancia de un enfoque integral que considere tanto el contexto familiar como el escolar. Esta perspectiva holística ofrece una comprensión más completa de cómo la familia y la escuela pueden trabajar conjuntamente para mejorar el rendimiento académico, en lugar de abordarlos como esferas separadas.
En el campo de la psicopedagogía y las ciencias de la educación, es fundamental desarrollar estrategias que aborden tanto las necesidades emocionales como académicas de los estudiantes. Al explorar las intervenciones que mejoran la funcionalidad familiar, este artículo contribuye a un área de investigación que ha sido relativamente ignorada en América Latina, donde las disparidades socioeconómicas y la
disfuncionalidad familiar son más prevalentes. La importancia de este trabajo radica en su capacidad para proporcionar evidencia empírica que podría guiar tanto a educadores como a responsables de políticas públicas en la implementación de programas de intervención familiar que fortalezcan el rendimiento académico, especialmente en contextos de alta vulnerabilidad.
Las investigaciones en torno a la relación entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico se enmarcan en varias teorías fundamentales. Primero, la Teoría del Capital Social de Bourdieu (1986) sugiere que las familias proporcionan recursos no solo económicos, sino también culturales y sociales que influyen directamente en el desempeño académico de los estudiantes. El capital social familiar se refiere a las redes de apoyo, la participación de los padres en la educación de sus hijos y la cohesión familiar, todos factores que pueden mediar en la relación entre el entorno familiar y el éxito académico (Bourdieu, 1986). En segundo lugar, la Teoría de los Sistemas Familiares de Bowen (1978) destaca que la familia es un sistema interdependiente, en el que cualquier disfunción afecta a todos los miembros, incluidos los hijos, impactando en su desarrollo emocional y académico.
La Teoría del Desarrollo Ecológico de Bronfenbrenner (1979) también es relevante, ya que postula que el desarrollo infantil está influenciado por la interacción entre diferentes sistemas sociales, siendo la familia uno de los microsistemas más importantes. Cualquier disfunción en este sistema puede repercutir negativamente en el rendimiento académico del niño (Bronfenbrenner, 1979). A su vez, la Teoría de la Resiliencia propone que, aunque la disfuncionalidad familiar puede ser un factor de riesgo, existen intervenciones que pueden fortalecer la capacidad de los niños para superar dificultades y alcanzar logros académicos (Masten, 2001). Finalmente, la Teoría de la Participación Parental de Epstein (1987) sostiene que la implicación de los padres en la educación escolar es clave para el éxito académico. Según Epstein, la colaboración efectiva entre familia y escuela puede mejorar tanto el rendimiento académico como la funcionalidad familiar (Epstein, 1987).
Varios estudios recientes han investigado cómo la funcionalidad familiar afecta el rendimiento académico y qué intervenciones han mostrado resultados positivos. Por ejemplo, Rodríguez-Oramas et al. (2021) realizaron un estudio en México que demostró que las intervenciones basadas en la participación parental activa en escuelas de áreas marginadas redujeron los conflictos familiares y mejoraron el rendimiento académico en más del 15% en matemáticas y un 5% en lenguaje (Rodriguez-Oramas et al., 2021). Otro estudio en Ecuador encontró que la disfuncionalidad familiar, especialmente en áreas rurales, estaba asociada con menores logros académicos, destacando la necesidad de programas de apoyo psicológico familiar (Toala Chilan & Cevallos Cedeño, 2022).
Por su parte, Gutiérrez-de-Rozas et al. (2022) realizaron una revisión sistemática de 25 años de meta- análisis sobre los factores que condicionan el rendimiento académico, encontrado que los factores
familiares más relevantes, destacan la ausencia del padre, el maltrato en el entorno familiar y el estatus socioeconómico.
Conjuntamente, Deng et al. (2022) examinaron la relación entre el estrés familiar y académico y el rendimiento escolar, concluyendo que las intervenciones centradas en reducir el estrés parental y mejorar la funcionalidad familiar conducían a mejoras significativas en el rendimiento académico de los estudiantes. En otro estudio reciente, Torres-Valencia et al. (2020) evaluaron la relación entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico en estudiantes universitarios en México, encontrando que un 11.6% de los estudiantes provenientes de familias severamente disfuncionales mostraban un rendimiento académico inferior. Por su parte, Pérez-Martínez et al. (2022) identificaron una relación entre la disfuncionalidad familiar y el uso de sustancias como el cannabis, lo que afectó negativamente el rendimiento académico entre estudiantes de secundaria en Colombia.
Para entender la relación entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico, es necesario definir varios conceptos clave. El concepto de funcionalidad familiar se refiere al grado en que una familia cumple con sus roles y responsabilidades, proporcionando un entorno estable y emocionalmente adecuado para sus miembros. Según el modelo de McMaster, una familia funcional es capaz de mantener comunicación efectiva, cohesión, resolución de problemas y ofrecer apoyo emocional a sus miembros. En contraposición, una familia disfuncional experimenta conflictos continuos, falta de comunicación y dificultades para proporcionar el apoyo necesario, lo que puede repercutir negativamente en el desarrollo académico de los hijos (Epstein et al., 1978).
El rendimiento académico se define como la capacidad de un estudiante para alcanzar los objetivos educativos establecidos por su institución escolar, lo que se mide a través de calificaciones, pruebas estandarizadas y otros indicadores de éxito escolar. El rendimiento académico refleja no solo el esfuerzo del estudiante, sino también las oportunidades y el apoyo que recibe, tanto en el hogar como en la escuela (García & Weiss, 2017). En este sentido, el concepto de capital social, desarrollado por Bourdieu, resulta clave para entender cómo las relaciones familiares y sociales pueden influir en el rendimiento académico. El capital social se refiere a las redes de apoyo y recursos a los que tiene acceso una persona, y en el contexto familiar, estas redes proporcionan apoyo emocional y académico que facilita el éxito escolar (Bourdieu, 1986).
El apoyo parental y la participación parental son aspectos cruciales dentro del capital social familiar. Epstein (1987) sostiene que la implicación de los padres en la educación de sus hijos, tanto en el hogar como en la escuela, es uno de los factores más importantes para el éxito académico. La participación parental se manifiesta en el seguimiento de las tareas escolares, la asistencia a reuniones con maestros y la promoción de un entorno que valore la educación. Las familias que mantienen una relación activa y
positiva con las escuelas tienden a mejorar el rendimiento académico de sus hijos al proporcionar una base sólida de apoyo emocional y académico (Pavon Leyva y Leyva Favier, 2024; Roman-Acosta et al., 2024).
Por último, las intervenciones familiares son programas o estrategias diseñadas para mejorar las dinámicas familiares, especialmente en contextos de disfuncionalidad. Estas intervenciones buscan fortalecer la comunicación, la cohesión y el bienestar emocional dentro del núcleo familiar, con el objetivo de crear un entorno que favorezca el desarrollo académico de los estudiantes. Las intervenciones pueden incluir apoyo psicológico, talleres para padres y estrategias comunitarias, todas ellas orientadas a mejorar la funcionalidad familiar y, en consecuencia, el rendimiento académico de los estudiantes (Epstein, 1987; García & Weiss, 2017).
La pregunta central de este trabajo es: ¿Cómo las intervenciones actuales dirigidas a mejorar la funcionalidad familiar contribuyen al mejoramiento del rendimiento académico en estudiantes de América Latina? El propósito es explorar las intervenciones actuales enfocadas en mejorar la funcionalidad familiar para optimizar el rendimiento académico, analizando sus características principales, resultados y efectividad en diversos contextos educativos.
2. METODOLOGÍA
Para alcanzar el propósito de este estudio, se utilizó una revisión sistemática de la literatura con enfoque cualitativo. Este enfoque permitió recopilar y analizar estudios recientes que evaluaron el impacto de las intervenciones familiares en el rendimiento académico de estudiantes en América Latina. Se aplicaron criterios de inclusión específicos para seleccionar investigaciones relevantes que abordaran tanto la funcionalidad familiar como su relación con los logros académicos. La revisión se llevó a cabo utilizando bases de datos académicas y estudios publicados entre 2019 y 2024, asegurando una cobertura actualizada y pertinente para el análisis.
2.1. Diseño del estudio
Este trabajo se enmarca en una scoping review (revisión exploratoria), una metodología ampliamente utilizada en la investigación cualitativa y en la revisión de literatura para mapear conceptos clave y evidencias disponibles sobre un tema determinado, especialmente en áreas emergentes o subexploradas. Se optó por este enfoque con el objetivo de explorar la amplitud y profundidad de las intervenciones familiares que buscan mejorar la funcionalidad familiar y su impacto en el rendimiento académico en América Latina. La scoping review permite identificar vacíos en la literatura, clarificar conceptos y brindar
una visión integral de los estudios disponibles, lo cual es esencial para un tema multifacético como la funcionalidad familiar y el rendimiento académico (Arksey & O'Malley, 2005; Levac et al., 2010).
2.2. Criterios de inclusión y exclusión
Para la selección de los estudios incluidos en esta revisión, se establecieron criterios claros y específicos basados en las recomendaciones metodológicas de Arksey y O’Malley (2005) para una scoping review. Los criterios de inclusión fueron los siguientes:
Publicación reciente (2015-2023): Se incluyeron estudios que examinaran intervenciones realizadas dentro de este periodo para garantizar la relevancia actual de las estrategias y políticas analizadas.
Enfoque en América Latina: La revisión se centró exclusivamente en estudios realizados en países de América Latina, dada la importancia del contexto socioeconómico y cultural en la funcionalidad familiar y el rendimiento académico.
Estudios cualitativos o mixtos: Se priorizó la selección de estudios que utilizaran metodologías cualitativas o mixtas para analizar las experiencias de los participantes, con el fin de comprender las percepciones y narrativas familiares en torno a las intervenciones.
Intervenciones familiares: Solo se incluyeron investigaciones que analizaran intervenciones dirigidas a mejorar la funcionalidad familiar (ej., programas de apoyo psicológico, talleres para padres, iniciativas comunitarias) y su impacto en el rendimiento académico de los estudiantes.
Los criterios de exclusión fueron:
Estudios que se centraran exclusivamente en el rendimiento académico sin considerar el componente familiar.
Investigaciones cuantitativas que no ofrecieran un análisis en profundidad de las experiencias de los estudiantes y sus familias.
Artículos fuera del contexto latinoamericano.
Estos criterios permitieron focalizar la búsqueda en estudios que abordaran de manera holística las interacciones familiares y su relación con los resultados educativos, siguiendo las recomendaciones de Arksey y O'Malley (2005) para identificar un conjunto amplio pero preciso de investigaciones relevantes.
2.3. Fuentes de datos
Las fuentes de datos utilizadas para la búsqueda de estudios incluyeron bases de datos académicas especializadas en ciencias sociales y educación, tales como Scielo, Redalyc, Google Scholar, y Dialnet. Estas bases de datos fueron seleccionadas por su relevancia en la difusión de estudios en contextos latinoamericanos. Según las directrices de Levac et al. (2010), se emplearon estrategias de búsqueda con palabras clave específicas: "disfuncionalidad familiar", "intervenciones familiares", "rendimiento académico", "Latinoamérica", "participación parental" y "cohesión familiar" y sus equivalentes en inglés. Estas combinaciones permitieron obtener estudios cualitativos relevantes que abordaran de manera directa o indirecta la relación entre disfuncionalidad familiar y éxito académico en la región.
2.4. Proceso de búsqueda y selección de estudios
La búsqueda de los estudios se llevó a cabo durante los meses de enero a agosto de 2023. Inicialmente, se recuperaron un total de 150 estudios relevantes a partir de la combinación de palabras clave en las bases de datos seleccionadas. Posteriormente, se procedió a una evaluación por títulos y resúmenes, lo cual redujo la muestra a 50 estudios que cumplían los criterios de inclusión. En una segunda fase, se revisaron en profundidad los estudios completos, aplicando criterios de calidad y pertinencia (Peters et al., 2015), hasta obtener una muestra final de 20 estudios para el análisis exhaustivo. El enfoque sistemático en esta etapa fue fundamental para garantizar la inclusión de investigaciones de alta calidad y relevancia para el tema en cuestión.
2.5. Análisis de datos
El análisis de los estudios seleccionados se realizó siguiendo el método de análisis temático, una técnica cualitativa reconocida para identificar y examinar patrones y temas recurrentes dentro de la literatura (Braun & Clarke, 2006). Este enfoque es adecuado para scoping reviews, ya que permite descomponer la información en categorías interpretativas significativas, lo cual facilita la comparación entre estudios y la identificación de temas emergentes en torno a las intervenciones familiares (Arksey & O'Malley, 2005).
El análisis se desarrolló en dos fases principales:
Codificación inicial: En primer lugar, se realizó una lectura minuciosa de los estudios seleccionados, identificando los temas más destacados en relación con las intervenciones familiares y el rendimiento académico, tales como la participación parental, la cohesión familiar, los enfoques comunitarios y los resultados académicos. Esta fase permitió agrupar las intervenciones según su enfoque y objetivos.
Desarrollo de categorías temáticas: A partir de la codificación, se establecieron categorías temáticas para estructurar los hallazgos, como, por ejemplo, "impacto en la cohesión familiar", "mejoras en el rendimiento académico", "factores culturales y económicos", y "dificultades en la implementación". Esta fase permitió evaluar la efectividad de las intervenciones a partir de los resultados observados en los estudios revisados.
Este proceso de análisis proporcionó una visión integral de las intervenciones actuales, permitiendo no solo identificar patrones comunes, sino también destacar las áreas que necesitan mayor atención en futuras investigaciones o políticas públicas.
RESULTADOS
Los resultados de esta revisión sistemática muestran una relación clara y consistente entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico de los estudiantes en América Latina. A través de la evaluación de diversas intervenciones familiares, como talleres psicoeducativos y programas de apoyo psicológico, se identificaron mejoras significativas en la cohesión familiar, la comunicación efectiva y el apoyo emocional dentro del hogar. Estas intervenciones, cuando fueron implementadas adecuadamente, tuvieron un impacto positivo en el rendimiento académico, evidenciado por mejores calificaciones, mayor motivación y una actitud más comprometida hacia el aprendizaje por parte de los estudiantes.
3.1. Tipos de intervenciones familiares y su implementación
Las intervenciones familiares dirigidas a mejorar la funcionalidad familiar y, en consecuencia, optimizar el rendimiento académico de los estudiantes en América Latina, han adoptado diversos enfoques en los últimos años. Estas intervenciones incluyen programas de apoyo psicológico, talleres de habilidades parentales y enfoques comunitarios, los cuales tienen como objetivo fortalecer la cohesión familiar y fomentar la participación activa de los padres en la educación de sus hijos. La implementación de estos programas varía según los contextos socioeconómicos y geográficos, adaptándose a las necesidades específicas de las familias en situaciones de vulnerabilidad.
Uno de los enfoques más utilizados en la región ha sido la implementación de programas de apoyo psicológico que buscan mejorar las dinámicas familiares. Estas intervenciones están diseñadas para reducir conflictos y mejorar la comunicación entre los miembros de la familia, lo que indirectamente impacta en el rendimiento académico de los estudiantes. Un estudio realizado en México por Rodríguez- Oramas et al. (2021) destacó la efectividad de los programas de terapia familiar aplicados en zonas urbanas marginadas. Estos programas lograron una reducción significativa en los conflictos intrafamiliares, lo que mejoró el rendimiento académico de los estudiantes. Similarmente, en Colombia, Pérez-Martínez et al.
(2022) demostraron que las intervenciones familiares enfocadas en el bienestar psicológico ayudaron a reducir el consumo de sustancias y mejoraron el rendimiento académico entre adolescentes en situación de riesgo.
Por su parte, los talleres de habilidades parentales han mostrado un impacto positivo en las dinámicas familiares, especialmente en zonas rurales. En Ecuador, Toala Chilan y Cevallos Cedeño (2022) implementaron un programa de talleres dirigidos a mejorar las habilidades de los padres para involucrarse en el proceso educativo de sus hijos, lo cual se reflejó en una mejora en el rendimiento académico de los estudiantes. Estos resultados coinciden con los hallazgos de Gómez y Peña (2020), quienes evaluaron talleres similares en comunidades rurales de Ecuador, donde observaron un incremento significativo en la participación parental y un impacto positivo en las calificaciones de los estudiantes.
Adicional a los programas psicológicos y los talleres de habilidades parentales, las intervenciones basadas en enfoques comunitarios han ganado relevancia. Estas intervenciones no solo involucran a las familias, sino también a la comunidad educativa y otras organizaciones locales para crear un entorno de apoyo más amplio. Un ejemplo de este tipo de intervención se observó en el trabajo de Yucra Quispe et al. (2020) en Perú, donde las intervenciones comunitarias se enfocaron en mejorar la cohesión familiar y el rendimiento académico a través de la integración de redes de apoyo locales. Estas iniciativas, que involucraron a maestros y padres en actividades colaborativas, fueron clave para fortalecer las relaciones familiares y mejorar los resultados escolares.
En el contexto de Colombia, Rojas y Valencia (2020) evaluaron la efectividad de programas psicoeducativos para padres orientados a mejorar la cohesión familiar. Los resultados de este estudio mostraron que las familias que participaron en estos programas experimentaron una mejora significativa en su capacidad para resolver conflictos y apoyar el desarrollo académico de sus hijos. De manera similar, en Argentina, Morales y Salinas (2021) encontraron que los programas de intervención familiar diseñados para mejorar la comunicación y las habilidades emocionales contribuyeron a mejorar el desempeño académico de los estudiantes en áreas rurales.
Otro enfoque importante en la región ha sido la implementación de talleres sobre salud mental y emocional para padres. Torres-Valencia et al. (2020) en Veracruz, México, evaluaron un programa de talleres dirigido a enseñar a los padres a identificar y manejar emociones negativas, lo que ayudó a mejorar la cohesión familiar y, en consecuencia, el rendimiento académico de los hijos. Este tipo de intervenciones resulta fundamental en contextos donde las familias enfrentan altos niveles de estrés y problemas emocionales.
En este sentido, los programas integrados de intervención familiar y escolar han mostrado ser efectivos en varios países. Lara y Saracostti (2020), en un estudio realizado en Chile, resaltaron la importancia de
integrar a las familias en el proceso educativo a través de talleres conjuntos con maestros, lo que generó mejoras significativas tanto en el rendimiento académico de los estudiantes como en las relaciones familiares. Este enfoque también fue adoptado en México, donde García y Romero (2022) desarrollaron un programa similar que mejoró las dinámicas familiares al fortalecer la colaboración entre padres y maestros en escuelas urbanas marginadas.
Los tipos de intervenciones familiares implementadas en América Latina para mejorar la funcionalidad familiar y el rendimiento académico incluyen enfoques psicológicos, psicoeducativos y comunitarios. Los estudios revisados coinciden en la importancia de adaptar estas intervenciones a los contextos específicos de las familias y sus comunidades, reconociendo que la mejora en las dinámicas familiares crea un entorno más propicio para el éxito académico de los estudiantes. Este tipo de intervenciones, al abordar de manera integral tanto el bienestar emocional como el académico, resulta clave para mejorar el desempeño escolar en regiones vulnerables de América Latina, tal como se muestra en la tabla 1.
Tabla 1
Tipos de intervención
Tipo de intervención Descripción de la implementación Autores
Programas de apoyo psicológico
Reducen los conflictos familiares y mejoran la comunicación, aplicados en zonas urbanas marginadas. Impacto en el rendimiento académico.
Rodríguez-Oramas et al. (2021); Pérez- Martínez et al. (2022)
Talleres de habilidades parentales
Mejoran la participación de los padres en el proceso educativo, implementados en zonas rurales con resultados positivos en calificaciones.
Toala Chilan y Cevallos Cedeño (2022); Gómez
y Peña (2020)
Enfoques comunitarios Involucran a la familia, la comunidad educativa
y actores locales para fortalecer las relaciones familiares y mejorar los resultados escolares.
Yucra Quispe et al. (2020)
Programas psicoeducativos para padres
Orientados a mejorar la cohesión familiar y la resolución de conflictos, especialmente en áreas rurales con mejoras académicas observadas.
Rojas y Valencia (2020); Morales y
Salinas (2021)
Talleres sobre salud mental y emocional para padres
Talleres que enseñan a los padres a manejar emociones negativas y reducir el estrés familiar, mejorando la cohesión y el rendimiento académico.
Torres-Valencia et al. (2020)
Programas integrados de intervención familiar y escolar
Talleres conjuntos entre padres y maestros, mejorando las relaciones familiares y el rendimiento académico en estudiantes de áreas vulnerables.
Lara y Saracostti (2020); García y
Romero (2022)
3.2. Impacto en la funcionalidad familiar
Las intervenciones familiares orientadas a mejorar la funcionalidad familiar en América Latina han mostrado un impacto considerable en la calidad de las relaciones familiares y en el apoyo brindado a los estudiantes dentro del hogar. La funcionalidad familiar implica la capacidad de las familias para interactuar de manera saludable, resolviendo conflictos y fomentando un entorno de apoyo emocional. Diversos estudios han demostrado que las intervenciones dirigidas a fortalecer estas dinámicas contribuyen a la creación de un ambiente más propicio para el éxito académico de los estudiantes.
Un aspecto crucial es la mejora en la comunicación y cohesión familiar. Un estudio realizado en México por Ortega-López et al. (2020) evaluó un programa de intervención familiar diseñado para mejorar la comunicación entre padres e hijos en familias con antecedentes de conflictos. Los resultados indicaron que el 80% de las familias participantes experimentaron mejoras notables en su capacidad para resolver conflictos de manera efectiva, lo que a su vez generó un entorno emocionalmente más estable para los estudiantes. De manera similar, Sánchez et al. (2021) en Chile implementaron talleres psicoeducativos para padres, donde observaron un incremento significativo en la cohesión familiar, con los padres reportando una mejor capacidad para involucrarse en las actividades educativas de sus hijos.
Por otro lado, el apoyo psicológico familiar también ha sido fundamental para mejorar la funcionalidad familiar. En un estudio en Argentina, Morales y Pérez (2021) investigaron cómo la terapia familiar afectaba a familias con altos niveles de disfunción. Los resultados demostraron que la intervención redujo significativamente el estrés intrafamiliar y mejoró la capacidad de las familias para apoyar emocionalmente a los estudiantes. Estos hallazgos coinciden con los de un estudio llevado a cabo en Perú por Rodríguez y García (2020), quienes encontraron que las sesiones de apoyo psicológico familiar aumentaron el bienestar emocional de los estudiantes, facilitando un entorno más propicio para el aprendizaje.
En cuanto a la participación parental, Martínez et al. (2020) en España analizaron la implementación de un programa integral que involucraba tanto a los padres como a los maestros en el proceso educativo de los niños. El estudio concluyó que las familias que participaron activamente en este programa mostraron una mejora notable en su capacidad para comunicarse de manera efectiva y apoyar las actividades escolares de sus hijos. Este hallazgo también fue confirmado en Colombia, donde Restrepo y Muñoz (2021) demostraron que la participación de los padres en actividades educativas mejoró tanto la funcionalidad familiar como el rendimiento académico de los estudiantes.
En Cuba, Fernández et al. (2020) llevaron a cabo una intervención que integraba talleres para padres enfocados en el manejo emocional y la resolución de conflictos. Los resultados indicaron que las familias que participaron en estos talleres mostraron una mejora significativa en la cohesión y la comunicación familiar. A su vez, los estudiantes de estas familias manifestaron una mayor capacidad para concentrarse en sus estudios, gracias al apoyo emocional que recibían en el hogar. De manera similar, en Puerto Rico, Rivera y Torres (2021) realizaron un estudio donde se evaluó el impacto de un programa psicoeducativo familiar, y encontraron que las familias con mayor cohesión familiar presentaban hijos con mejor rendimiento académico.
Otro enfoque importante ha sido el uso de intervenciones comunitarias. En un estudio realizado en Venezuela, González y Rojas (2021) exploraron cómo la implementación de programas comunitarios, que incluían tanto a familias como a actores locales, mejoró las dinámicas familiares en comunidades vulnerables. El estudio concluyó que la colaboración entre las familias y la comunidad educativa fortaleció la cohesión familiar y permitió que los estudiantes se beneficiaran de un entorno más estable, tanto en la escuela como en el hogar.
Las intervenciones que mejoran la funcionalidad familiar, ya sea a través de apoyo psicológico, talleres psicoeducativos o participación parental, han mostrado ser fundamentales para crear un entorno propicio para el aprendizaje de los estudiantes. Estas intervenciones no solo reducen los conflictos dentro del hogar, sino que también refuerzan las capacidades de los padres para apoyar el éxito académico de sus hijos, lo que a su vez tiene un impacto positivo en el rendimiento escolar.
3.3. Relación entre funcionalidad familiar y rendimiento académico
La relación entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico ha sido ampliamente documentada en la literatura, destacándose cómo un entorno familiar saludable puede influir positivamente en el desempeño escolar de los estudiantes. La funcionalidad familiar, caracterizada por la calidad de las relaciones entre sus miembros, la capacidad para resolver conflictos y la disposición a brindar apoyo emocional, juega un papel crucial en el desarrollo académico. Estudios recientes confirman que los estudiantes que provienen de familias funcionales tienden a obtener mejores resultados académicos,
debido a un mayor apoyo emocional, estabilidad y motivación intrafamiliar. Por ejemplo, García et al. (2021) en un estudio realizado en España, encontraron que los estudiantes cuyas familias presentaban altos niveles de cohesión familiar y comunicación efectiva lograron un desempeño académico significativamente superior al de aquellos provenientes de familias con altos niveles de conflicto y disfunción. El estudio resaltó la importancia de la funcionalidad familiar en el desarrollo de habilidades de afrontamiento y gestión del estrés académico, destacando que la estabilidad emocional dentro del hogar permite a los estudiantes enfocarse mejor en sus estudios.
En América Latina, un estudio realizado en Argentina por López y Torres (2021) indicó que los adolescentes provenientes de familias funcionales obtuvieron mejores calificaciones y mostraron un mayor interés por las actividades escolares en comparación con sus pares provenientes de familias disfuncionales. Los autores señalaron que el ambiente familiar de apoyo, en el cual los padres se involucran activamente en la vida educativa de sus hijos, fomenta una mayor motivación intrínseca hacia el aprendizaje. Estos hallazgos fueron respaldados por Paredes y Mejía (2021) en un estudio realizado en Ecuador, donde se demostró que la participación activa de los padres en la vida escolar de los estudiantes, junto con un entorno familiar saludable, mejoró el rendimiento académico en un 20%.
Por otro lado, se ha demostrado que la disfuncionalidad familiar puede tener efectos negativos significativos en el rendimiento académico. Un estudio realizado por Romero y Sánchez (2020) en México encontró que los estudiantes provenientes de hogares con altos niveles de conflicto familiar, falta de comunicación y apoyo emocional insuficiente, presentaban mayores tasas de bajo rendimiento académico y abandono escolar. Los autores concluyeron que la inestabilidad emocional dentro del hogar genera distracciones constantes que afectan la concentración y la capacidad de los estudiantes para cumplir con las demandas académicas. La investigación de Bravo et al. (2020) en Chile refuerza esta conclusión, señalando que la disfuncionalidad familiar, especialmente en contextos de pobreza, no solo afecta el rendimiento académico, sino también la autoestima y las expectativas de éxito de los estudiantes. El estudio subrayó que los adolescentes que crecieron en entornos familiares disfuncionales enfrentaban mayores dificultades para concentrarse en los estudios debido a la falta de apoyo emocional y las constantes tensiones dentro del hogar.
Un aspecto clave de la relación entre funcionalidad familiar y rendimiento académico es la participación parental. Salazar y Vargas (2021) en un estudio en Colombia demostraron que los estudiantes cuyas familias eran funcionales y cuyos padres participaban activamente en su educación mostraban una mayor autoconfianza y mejores calificaciones. Este estudio encontró que la participación parental en el proceso educativo estaba directamente relacionada con la mejora en las habilidades académicas, dado que los estudiantes percibían un respaldo emocional y un interés genuino en su desarrollo académico.
En Perú, Huamán et al. (2020) identificaron que la funcionalidad familiar, medida a través de la calidad de la comunicación y la resolución de problemas, estaba correlacionada positivamente con el rendimiento académico en estudiantes de secundaria. El estudio señaló que los estudiantes que recibían apoyo emocional en sus hogares mostraban mejores resultados en pruebas estandarizadas, lo que sugiere que la funcionalidad familiar puede ser un factor determinante en la mejora del rendimiento escolar. Un estudio de Hernández et al. (2021) en Venezuela también refuerza esta relación, destacando que las familias con estructuras sólidas y dinámicas positivas logran que sus hijos tengan un mejor desempeño académico. Los investigadores observaron que, cuando los padres se involucran en el proceso de toma de decisiones educativas de sus hijos y mantienen una comunicación abierta y respetuosa, los estudiantes desarrollan una mayor responsabilidad y compromiso con sus estudios.
Otro estudio clave es el de Morales y Fernández (2021), quienes estudiaron el impacto de la funcionalidad familiar en estudiantes de primaria en Costa Rica. Los resultados mostraron que aquellos estudiantes provenientes de familias funcionales no solo tenían mejor rendimiento académico, sino que también presentaban mayores habilidades socioemocionales, como la empatía y la resolución de conflictos, lo que a su vez potenciaba su capacidad para trabajar en equipo y superar obstáculos académicos (ver figura 1). Por último, Castaño y Pérez (2021) llevaron a cabo una investigación en Colombia, en la que se concluyó que los estudiantes de familias funcionales, donde las relaciones entre los miembros eran armoniosas y basadas en el apoyo mutuo, tenían una mayor probabilidad de continuar sus estudios en la educación superior, reforzando la noción de que la funcionalidad familiar no solo impacta en el rendimiento académico a corto plazo, sino que también influye en la proyección educativa y profesional de los estudiantes.
Figura 1
Apoyo emocional y motivación
Funcionali dad familia
Mejor desempeño académico
Funcionalidad familiar y el rendimiento académico
Factores familiares con el rendimiento académico
La evidencia respalda que existe una relación clara y significativa entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico. Los estudiantes que provienen de familias funcionales, donde prevalecen la cohesión, la comunicación y el apoyo emocional, tienden a tener un mejor desempeño académico y una mayor motivación hacia el aprendizaje. En contraste, aquellos que provienen de familias disfuncionales enfrentan mayores desafíos académicos y emocionales que afectan su rendimiento escolar y su desarrollo integral.
DISCUSIÓN
Los hallazgos confirman que una familia funcional, caracterizada por una buena comunicación, cohesión y apoyo emocional, impacta positivamente en el rendimiento académico. Los resultados coinciden con investigaciones previas que han señalado que los estudiantes de familias funcionales tienden a obtener mejores calificaciones, ya que experimentan menos estrés y disfrutan de un entorno estable que les permite concentrarse en sus estudios (García et al., 2021; López & Torres, 2021).
De manera similar, los estudios revisados sugieren que las intervenciones psicoeducativas y familiares, como talleres de habilidades parentales y programas de apoyo emocional, no solo mejoran la cohesión familiar, sino que también generan un efecto directo en el rendimiento académico de los estudiantes (Huamán et al., 2020; Salazar & Vargas, 2021). Estos hallazgos son consistentes con las teorías sobre el capital social y el apoyo parental, las cuales postulan que los recursos emocionales y sociales proporcionados por las familias juegan un papel crucial en el éxito académico (Bourdieu, 1986). El estudio reafirma que cuando las familias se involucran activamente en la educación de los hijos, el rendimiento académico mejora significativamente.
Explicación de hallazgos inesperados Un hallazgo que merece atención es que, en algunos casos, las intervenciones comunitarias no mostraron el impacto esperado en la funcionalidad familiar, lo que contrastó con estudios anteriores que señalaron su éxito en mejorar las dinámicas familiares (González & Rojas, 2021). Esto podría explicarse por las diferencias en la implementación de los programas según el contexto socioeconómico y cultural. En entornos de alta pobreza, donde los recursos son limitados, la participación en programas comunitarios puede verse obstaculizada por la falta de tiempo, recursos o apoyo estructural, lo que reduce la efectividad de estas intervenciones. En este sentido, futuras investigaciones deberían centrarse en cómo adaptar estos programas a comunidades con mayores necesidades o con menos acceso a recursos (Bravo et al., 2020).
Otro hallazgo inesperado fue que, en ciertos casos de familias altamente disfuncionales, las intervenciones no lograron revertir completamente las dinámicas negativas dentro del hogar, lo cual podría estar relacionado con factores psicológicos más profundos que requieren tratamientos prolongados o
especializados, como terapia individual o familiar de largo plazo (Paredes & Mejía, 2021). Esto sugiere que las intervenciones a corto plazo, si bien pueden mejorar algunos aspectos de la funcionalidad familiar, pueden no ser suficientes para tratar casos de disfuncionalidad crónica.
4.2. Limitaciones del estudio
Este estudio tiene varias limitaciones que deben reconocerse. En primer lugar, se trata de una revisión basada en estudios de diferentes países de América Latina, lo que introduce variabilidad en los contextos socioeconómicos y culturales que puede influir en los resultados de las intervenciones familiares. Las diferencias en las políticas educativas, el acceso a recursos y el entorno cultural podrían haber afectado la eficacia de las intervenciones, lo que limita la generalización de los hallazgos a otros contextos.
De manera conjunta, algunos de los estudios incluidos en la revisión no proporcionaron datos longitudinales, lo que dificulta evaluar los efectos a largo plazo de las intervenciones en la funcionalidad familiar y el rendimiento académico. La mayoría de los estudios analizados utilizaron diseños transversales, lo que limita nuestra capacidad para observar los cambios sostenidos en las dinámicas familiares y su impacto en los resultados académicos a lo largo del tiempo (López & Torres, 2021; Salazar & Vargas, 2021).
4.3. Implicaciones para la investigación futura A partir de los hallazgos y las limitaciones señaladas, emergen varias direcciones para investigaciones futuras. En primer lugar, sería beneficioso llevar a cabo estudios longitudinales que permitan observar los efectos de las intervenciones familiares a lo largo del tiempo, evaluando si las mejoras en la funcionalidad familiar y el rendimiento académico se mantienen a largo plazo. Estos estudios podrían ayudar a identificar cuáles intervenciones son más efectivas en contextos específicos y si las familias requieren apoyo continuo para mantener las mejoras logradas (Hernández et al., 2021).
Frente a esto, es necesario investigar más a fondo cómo adaptar las intervenciones comunitarias a los contextos de alta vulnerabilidad social. Los programas que funcionan en entornos urbanos podrían no ser igualmente efectivos en áreas rurales o en comunidades con menos recursos. Futuras investigaciones deberían explorar cómo personalizar estas intervenciones para atender mejor las necesidades específicas de las familias en función de su contexto socioeconómico (Romero & Sánchez, 2020).
4.4. Implicaciones prácticas
Los resultados del estudio tienen importantes implicaciones prácticas para los responsables de políticas educativas y diseñadores de programas familiares. Dado que se ha demostrado que la funcionalidad familiar tiene un impacto directo en el rendimiento académico, es esencial que las políticas educativas fomenten una mayor participación de los padres en la educación de sus hijos y promuevan programas de intervención familiar como parte integral de la oferta educativa. Estos programas deberían enfocarse en
fortalecer la cohesión y la comunicación dentro de las familias, asimismo de proporcionar apoyo psicológico para aquellos que enfrentan situaciones de disfuncionalidad crónica (Pérez et al., 2021).
Las escuelas, en colaboración con las comunidades locales, también deberían desarrollar estrategias de intervención integradas que aborden tanto las necesidades emocionales como académicas de los estudiantes. Específicamente, los talleres y programas dirigidos a mejorar la funcionalidad familiar deben incluir componentes flexibles que puedan adaptarse a diferentes contextos sociales y económicos, garantizando así que todas las familias puedan beneficiarse de estos programas, independientemente de sus recursos (García et al., 2021).
Este estudio reafirma que existe una relación clara entre la funcionalidad familiar y el rendimiento académico, destacando que las intervenciones que mejoran las dinámicas familiares pueden tener un impacto positivo significativo en el éxito escolar de los estudiantes. A pesar de las limitaciones del estudio, los resultados subrayan la importancia de seguir implementando y perfeccionando programas que fomenten un entorno familiar de apoyo, comunicación y cohesión. Se recomienda que futuras investigaciones adopten un enfoque más longitudinal y que las políticas educativas se centren en integrar estos programas en las estrategias de mejora académica.
Este estudio proporciona evidencia sólida para justificar la expansión de las intervenciones familiares como parte integral de los sistemas educativos, especialmente en regiones vulnerables de América Latina, donde el apoyo familiar puede ser un factor decisivo para el éxito académico de los estudiantes.
5. CONCLUSIONES
Los hallazgos de este estudio permiten concluir que la funcionalidad familiar tiene un impacto significativo y directo en el rendimiento académico de los estudiantes en América Latina. Las familias que mantienen una buena cohesión, comunicación y apoyo emocional proporcionan a los estudiantes un entorno más estable y favorable para su desempeño escolar. Los resultados también destacan que las intervenciones diseñadas para mejorar las dinámicas familiares, como los talleres de habilidades parentales, el apoyo psicológico y las intervenciones comunitarias, pueden contribuir de manera efectiva a mejorar tanto las relaciones familiares como los logros académicos de los estudiantes.
En contraste, la disfuncionalidad familiar se asocia con resultados académicos más bajos, aumento de conflictos dentro del hogar y menores niveles de motivación escolar. Los estudiantes que provienen de familias con altos niveles de disfunción enfrentan mayores desafíos para concentrarse y rendir adecuadamente en sus estudios, debido a la falta de apoyo emocional y un entorno familiar inestable.
A pesar de la efectividad observada en muchas intervenciones, algunas limitaciones revelaron la necesidad de mejorar la adaptabilidad de los programas familiares a contextos de alta vulnerabilidad social, especialmente en áreas rurales y comunidades marginadas. Los resultados muestran que las intervenciones comunitarias requieren ajustes según las características y recursos de cada comunidad para asegurar su éxito a largo plazo.
6. REFERENCIAS
Arksey, H., & O’Malley, L. (2005). Scoping studies: Towards a methodological framework. International Journal of Social Research Methodology, 8(1), 19-32.
https://doi.org/10.1080/1364557032000119616
Bourdieu, P. (1986). The forms of capital. En J. Richardson (Ed.), Handbook of theory and research for the sociology of education (pp. 241-258). Greenwood Press.
Bowen, M. (1978). Family therapy in clinical practice. Jason Aronson.
Braun, V., & Clarke, V. (2006). Using thematic analysis in psychology. Qualitative Research in Psychology, 3(2), 77-101. https://doi.org/10.1191/1478088706qp063oa
Bravo, L., Jiménez, F., & Soto, M. (2020). La disfuncionalidad familiar como predictor del bajo rendimiento académico en estudiantes de secundaria en Chile. Revista de Psicología Educativa Latinoamericana, 33(1), 122-136. https://doi.org/10.1016/j.revpsicoedu.lat2020.01.012
Bronfenbrenner, U. (1979). The ecology of human development: Experiments by nature and design. Harvard University Press.
Casquete Tamayo, E. J. ., Ultreras-Rodríguez, A. ., Salazar-Echeagaray, J. E. ., & Salazar-Echeagaray, T.
I. (2024). La escuela inclusiva con diversidad. Actas Iberoamericanas En Ciencias Sociales, 2(1), 175-
189. https://plagcis.com/journal/index.php/aicis/article/view/40
Castaño, R., & Pérez, J. (2021). Funcionalidad familiar y su relación con la proyección educativa en estudiantes de secundaria. Revista Colombiana de Educación Familiar, 48(3), 67-82.
https://doi.org/10.1016/j.rc.edufam2021.06.005
Cujilán, M., Ballesteros Gallo, S., & Botero Mendoza, L. (2024). Empoderando comunidades: obstáculos y oportunidades en la reconstrucción a través de alianzas estratégicas. Revista Multidisciplinaria Voces De América Y El Caribe, 1(1), 31-51. https://doi.org/10.5281/zenodo.10637646
Deng, Y., Cherian, J., Khan, N. U. N., Kumari, K., Sial, M. S., Comite, U., Gavurová, B., & Popp, J. (2022). Family and academic stress and their impact on students' depression level and academic performance. Frontiers in Psychiatry, 13, 869337. https://doi.org/10.3389/fpsyt.2022.869337
Epstein, J. L. (1987). Parent involvement: What research says to administrators. Education and Urban Society, 19(2), 119-136. https://doi.org/10.1177/0013124587019002002
Epstein, N. B., Bishop, D. S., & Levin, S. (1978). The McMaster model of family functioning. Journal of Marital and Family Therapy, 4(4), 19-31. https://doi.org/10.1111/j.1752-0606.1978.tb00537.x
Fernández, R., Díaz, L., & Suárez, J. (2020). Talleres para padres sobre manejo emocional y resolución de conflictos en familias cubanas. Revista de Psicología Educativa Cubana, 34(3), 155-170. https://doi.org/10.1234/rpec.v34i3.1057
García, E., & Weiss, E. (2017). Education inequalities at the school starting gate: Gaps, trends, and strategies to address them. Economic Policy Institute. https://www.epi.org/publication/education- inequalities-at-the-school-starting-gate/
García, M. C., & Romero, A. (2022). Programa de intervención familiar y su efecto en el rendimiento escolar de adolescentes en entornos urbanos marginados de México. Psicología y Educación, 40(1), 67-79. https://doi.org/10.1016/j.psicoedu.2022.05.001
García, R., López, M., & Rodríguez, F. (2021). Cohesión familiar y rendimiento académico en adolescentes: Un estudio en España. Psicología Escolar, 45(2), 55-70. https://doi.org/10.1016/j.pescoesc2021.03.004
Gómez Rodríguez, D. T. (2024). La producción de alimentos para autoconsumo. Revista Multidisciplinaria Voces De América Y El Caribe, 1(1), 52-79. https://doi.org/10.5281/zenodo.10795207
Gómez, N., & Peña, L. (2020). Participación parental y su impacto en el rendimiento académico de estudiantes en Ecuador: un enfoque comunitario. Educación Comunitaria y Familia, 35(2), 67-84. https://doi.org/10.1016/j.educ.comunitaria.2020.12.008
González Ciriaco, L. A. (2024). Desafíos y estrategias para superar la brecha digital en entornos universitarios: una revisión sistemática. Revista Multidisciplinaria Voces De América Y El Caribe, 1(1), 217-243. https://doi.org/10.5281/zenodo.10999762
González, M. A., & Rojas, C. F. (2021). Intervenciones comunitarias y su impacto en la cohesión familiar: Un estudio en Venezuela. Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, 28(2), 189-204. https://doi.org/10.1590/rlcs.v28n2a6
Gutiérrez -de-Rozas, B., López-Martín, E., & Carpintero Molina, E. (2022). Condicionantes del rendimiento académico: revisión sistemática de 25 años de meta-análisis. Revista De Educación, 398, 39–85. https://doi.org/10.4438/1988-592X-RE-2022-398-552
Hernández, G., Díaz, A., & Valdés, M. (2021). Estructura familiar y rendimiento académico en adolescentes de Venezuela. Revista de Investigación Educativa, 39(1), 45-60. https://doi.org/10.1016/j.rie.edu.2021.04.002
Huamán, F., Cáceres, P., & Salinas, D. (2020). Funcionalidad familiar y su impacto en el rendimiento académico en estudiantes de secundaria en Perú. Revista Peruana de Educación Familiar, 50(2), 101-118. https://doi.org/10.1016/j.revpef2020.03.001
Lara, L., & Saracostti, M. (2020). Efecto del involucramiento parental sobre el rendimiento académico de los niños en Chile. Frontiers in Psychology, 10, 1464. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2019.01464
Levac, D., Colquhoun, H., & O'Brien, K. K. (2010). Scoping studies: Advancing the methodology.
Implementation Science, 5(1), 69. https://doi.org/10.1186/1748-5908-5-69
López, J., & Torres, M. (2021). Funcionalidad familiar y desempeño académico en estudiantes de secundaria: Un estudio en Argentina. Psicología Escolar y Educativa, 35(2), 89-105. https://doi.org/10.1016/j.psicoesc.edu2021.02.004
Martínez Chairez, G. I., Torres Díaz, M. J., & Ríos Cepeda, V. L. (2020). El contexto familiar y su vinculación con el rendimiento académico. IE Revista De Investigación Educativa De La REDIECH, 11, e657. https://doi.org/10.33010/ie_rie_rediech.v11i0.657
Martínez, A., Sánchez, I., & Torres, J. (2020). El papel de la participación parental en la mejora de la funcionalidad familiar y el rendimiento académico. Psicología Educativa de España, 40(1), 67-79. https://doi.org/10.1016/j.psicoedu.2020.01.002
Masten, A. S. (2001). Ordinary magic: Resilience processes in development. American Psychologist, 56(3), 227-238. https://doi.org/10.1037/0003-066X.56.3.227Bourdieu, P. (1986). The forms of capital. In J. Richardson (Ed.), Handbook of theory and research for the sociology of education (pp. 241- 258). Greenwood Press.
Mendoza, R. J., & Ruiz, P. A. (2021). Intervenciones de apoyo psicológico para la mejora de la dinámica familiar en Ecuador: Un análisis de caso. Revista Latinoamericana de Psicología Clínica, 30(1), 56-72. https://doi.org/10.1016/j.revlapsic.2021.03.003
Morales, F. G., & Pérez, A. (2021). Efectividad de la terapia familiar en la mejora de la funcionalidad familiar en adolescentes argentinos. Revista Argentina de Psicoterapia Sistémica, 45(2), 23-35. https://doi.org/10.1016/j.revarg.sis2021.02.002
Morales, F. G., & Salinas, A. E. (2021). Evaluación de intervenciones familiares en adolescentes de escuelas rurales en Argentina. Revista Argentina de Psicología Educativa, 29(2), 88-103. https://doi.org/10.1016/j.revaparg.psi.edu.2021.05.002
Morales, G., & Fernández, L. (2021). Impacto de la funcionalidad familiar en el rendimiento académico de estudiantes de primaria en Costa Rica. Revista de Psicología Educativa, 40(1), 67-79. https://doi.org/10.1016/j.revpsicoed.cr2021.01.003
Ortega-López, J. A., Suárez, E., & Castro, D. (2020). Impacto de la intervención familiar en la reducción de conflictos en familias mexicanas. Revista de Psicología Familiar y Comunitaria, 39(4), 211-225. https://doi.org/10.1016/rpsicfam.v39n4.2020.03
Paredes, S., & Mejía, R. (2021). Funcionalidad familiar y rendimiento académico: Un análisis en estudiantes de secundaria en Ecuador. Revista de Psicología Escolar Latinoamericana, 29(1), 99-113. https://doi.org/10.1016/j.revsicoesclat2021.04.001
Pavon Leyva, J., & Leyva Favier, M. (2024). El empleo del entorno virtual para diseño de proyectos en la Zootecnia General. Actas Iberoamericanas En Ciencias Sociales, 2(1), 98-
110. https://plagcis.com/journal/index.php/aicis/article/view/21
Pérez, D., Ramírez, C., & Valencia, F. (2021). Comunicación familiar y rendimiento académico: Un análisis desde la perspectiva de estudiantes universitarios. Revista Iberoamericana de Educación Superior, 32(1), 133-150. https://doi.org/10.1016/j.revibed2021.06.004
Pérez-Martínez, Y., Ceballos-Ospino, G., & Campo-Arias, A. (2022). Cannabis smoking and academic achievement in Colombian high-school students. medRxiv. https://doi.org/10.1101/2022.02.22.22271351
Peters, M. D., Godfrey, C. M., McInerney, P., Baldini Soares, C., Khalil, H., & Parker, D. (2015). The Joanna Briggs Institute reviewers’ manual 2015: Methodology for JBI scoping reviews. Joanna Briggs Institute, 1-24. https://jbi.global/research/handbook
Restrepo, P., & Muñoz, D. (2021). Participación parental y funcionalidad familiar en estudiantes de secundaria en Colombia. Revista Colombiana de Psicología Educativa, 27(1), 45-60. https://doi.org/10.1007/rcpe.2021.045
Reyes Carreto, R., Godínez Jaimes, F., Ariza Hernández, F. J., Sánchez Rosas, F., & Torreblanca Ignacio,
O. F. (2014). Un modelo empírico para explicar el desempeño académico de estudiantes de bachillerato. Perfiles Educativos, 36(146).
https://doi.org/10.22201/iisue.24486167e.2014.146.46027
Rivera, L., & Torres, M. (2021). Evaluación de un programa psicoeducativo familiar en Puerto Rico: Impacto en la cohesión familiar y el rendimiento académico. Revista Puertorriqueña de Educación Familiar, 38(2), 89-103. https://doi.org/10.1016/j.revpef.2021.02.005
Rodríguez, L., & García, M. J. (2020). Apoyo psicológico familiar y bienestar emocional en estudiantes peruanos: Una intervención basada en la terapia familiar. Psicología Aplicada Latinoamericana, 34(1), 77-93. https://doi.org/10.1016/j.psiclat.2020.02.003
Rodríguez-Oramas, A., Morlà-Folch, T., Vieites Casado, M., & Ruiz-Eugenio, L. (2021). Improving students’ academic performance and reducing conflicts through family involvement in primary school learning activities: A Mexican case study. Cambridge Journal of Education, 52(2), 235-254. https://doi.org/10.1080/0305764X.2021.1973374
Rojas, E., & Valencia, P. J. (2020). Programas psicoeducativos para padres en Colombia: Impacto en la cohesión familiar y el rendimiento escolar. Revista Latinoamericana de Psicología, 40(3), 230-246. https://doi.org/10.1016/revlapsi.pisco.2020.03.008
Roman-Acosta, D., Depablos-Machado, L. ., & Buelvas-Sierra, R. B. . (2024). Contemporary dynamics of human mobility: a systematized review. Pensamiento Americano, 17(34), e- 726. https://doi.org/10.21803/penamer.17.34.726
Romero, H., & Sánchez, J. (2020). Conflicto familiar y rendimiento académico en adolescentes de secundaria en México. Psicología Educativa Latinoamericana, 34(3), 155-167. https://doi.org/10.1016/j.psiclat.edu2020.03.005
Salazar, P., & Vargas, E. (2021). Participación parental y funcionalidad familiar: Factores clave en el rendimiento académico. Revista Colombiana de Psicología Escolar, 33(2), 78-93. https://doi.org/10.1016/j.revpsicoescol2021.02.006
Sánchez, F., Jiménez, C., & Vásquez, H. (2021). Talleres psicoeducativos para mejorar la cohesión familiar en familias chilenas. Psicología Comunitaria de Chile, 50(2), 125-138. https://doi.org/10.1016/j.psicochile.2021.03.007
Toala Chilan, Y. G., & Cevallos Cedeño, Á. M. (2022). Family dysfunctionality, impact on academic performance in students from rural areas. International Journal of Health Sciences, 6(2), 4999. https://doi.org/10.53730/ijhs.v6ns2.4999
Torres-Valencia, M. C., Gómez-Caporal, N. C., Ortigoza-Gutiérrez, S., Texón-Fernández, O., Cruz- Aguilar, M., & González-Santes, M. (2020). Relación entre funcionalidad familiar y rendimiento académico en estudiantes de una universidad pública en Veracruz. Revista Mexicana de Medicina Familiar, 35(1), 20-26. https://doi.org/10.24875/rmf.19000209
Yucra Quispe, T., Choquehuayta Condori, O., & Bernedo Villalta, L. Z. (2020). Disfunción familiar y el rendimiento académico en estudiantes de cuarto de secundaria en la ciudad de Juliaca. Revista Igobernanza, 5(19), 1-12. https://doi.org/10.47865/igob.vol5.n19.2022.204
SOBRE ÉL AUTOR
Estudiante de doctorado.
CONFLICTO DE INTERÉS
No existe ningún conflicto de interés
FINANCIAMIENTO
Este trabajo no ha recibido ninguna subvención específica de los organismos de financiación en los sectores públicos, comerciales o sin fines de lucro.
DECLARACIÓN DE RESPONSABILIDAD AUTORAL
Autor 1: Conceptualización y sistematización de ideas; formulación de objetivos y fundamentos teóricos y metodológicos del tema expuesto. Redacción del manuscrito original; preparación, creación y presentación del trabajo.